| La creación
artificial de Huérfanos |
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| Publicado el 26.09.2001 |
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Estimado Fray Gerundio:
El fin del matrimonio es la procreación (dando el mejor cauce a la atracción intersexos y la fertilidad resultante). Las normas que rige la institución matrimonial directamente no se entenderían si no estuviera enderezado a ese fin. Esto ya lo he fundamentado en otros mensajes del apartado "familia". Sobre la doctrina de la Iglesia al respecto podrá dar precisiones suficientes el preclaro contertulio Moral Pública, ya que ese tema no es mi fuerte. Ahora bien, ello no quita que en virtud de un accidente biológico algunos matrimonios no puedan tener hijos y hasta es imaginable pensar que un número minúsculo de cónyuges renuncien para siempre y voluntariamente a tener hijos. Son simples excepciones que confirman la regla y como yo no estoy en ninguna cruzada moralista ni natalista, nada hay que decir al respecto.
La norma seguirá siendo la fertilidad de las uniones conyugales y como excepción lo contrario. Los niños totalmente húerfanos (En la desaparición del padre y la madre los niños generalmente quedan al cuidado de los abuelos o los tíos, la familia "ampliada) son escasos en número. Para ellos la sociedad tiene dos paliativos, la simple acogida o los orfanatos, por un lado y la adopción por el otro. Me remito a mi mensaje "Las razones de la inconveniencia de la adopción por parejas homosexuales" del apartado "familia" para la diferencia entre una y otra. A nadie (heterosexual u homosexual) se le niega la posibilidad de acoger un menor desamparado o dedicarse al sostén o atención de un orfanato. Pero como se supone que el acogedor no es un individuo egoísta y quiere lo mejor para el niño debe denunciar el desamparo del menor a la autoridad para que ésta ponga en marcha el mecanismo de la adopción: emplazarlo como hijo de una familia lo más parecida a la que perdió o debió tener: una padre varón y una madre mujer unidos en matrimonio y sin hijos (para no tener hermanos biologicos con los que competir en desventaja). No hay otro "modelo" de familia parecido. La pareja homosexual no lo es, falta en ella la enriquecedora complementariedad de la diversidad masculino-femenino, entre otras doce razones apuntadas en mi mensaje "razones de la inconveniencia...". La adopción presupone la plena valorización de la familia como la unidad reproductiva eficiente de la sociedad. La "adopción" homosexual implica en los hechos acabar con el instituto de la adopción y generalizar el de la acogida. El embate que contra la familia están produciendo diversos ideologismos (también heterosexuales por cierto) genera un nuevo fenómeno, que yo llamo "la creación artificial de huérfanos", que se da por dos vías: manipulaciones uniparentales (inseminación artificial, alquiler de vientres) y tráfico ilegal de niños (en que los padres de países pauperrimos se ven obligados a desprenderse de sus hijos a cambio de unas monedas). Lamentablemente, estas dos variantes se verán incrementadas con la adopción homosexual y lo pronostico sin tener ningún prejuicio antihomosexual. En cuanto a los niños "inadoptables" (enfermos, retrasados mentales, con malformaciones) serán inadoptables también para los "padres" homosexuales y ninguno de ellos saldrá de un orfanato por el hecho de aprobarse la adopción por parejas gay. (ver mi mensaje "los niños inadoptables son inadoptables" en este mismo apartado. Un niño rubio se cotiza en los mercados de niños del tercer mundo en 20.000 dólares, uno moreno 5.000 y un enfermo, retrasado o malformado, nada, y estas "tarifas" también regirán para los adoptantes homosexuales).
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